30.12.12

Mi Sueño

Mi sueño no es tener mucho dinero, ni mucha fama.

Mi sueño no es ser el mejor en lo que hago, ni ser el mejor en nada.

Mi sueño no es ser querido por mucha gente, ni caerle bien a todos.

Mi sueño no es ser reconocido por todo el mundo, ni tener un auto caro.

Mi sueño no es ser perfecto, ni cambiar mis defectos.

Mi sueño no es volver el tiempo atrás, ni ver el futuro.

Mi sueño en la vida, mi objetivo en este mundo, es lograr que mi funeral, este lleno de gente. No de gente triste y llorando, sino de gente riendo, al recordar lo momentos que compartió conmigo.

21.11.12

Gente


Hay gente que con solo decir una palabra
enciende la ilusión y los rosales
Hay gente que con solo dar la mano
rompe la soledad, pone la mesa ,
sirve el puchero, coloca las guirnaldas

Hay gente que con solo abrir la boca
llega a todos los límites del alma
alimenta una flor, inventa sueños,
hace cantar al vino en las tinajas
Y se queda después como si nada.
 
Y uno se va de novio con la vida
desterrando una muerte solitaria
pues sabe que a la vuelta de la esquina
¡Hay gente que es así tan necesaria!
Hamlet Lima Quintana.

18.11.12

Morir


Hace mucho tiempo leí esta frase:
"Morir mañana es tan bueno como morir cualquier otro día"
En su momento no le encontré mucho sentido.
Pero después me di cuenta de lo que quería decir... hay q estar siempre preparado para morir.
Lograr que morir no importe.
Hay que vivir una vida plena, haciendo todo lo que uno quiere, y que si te dicen que mañana vas a morir, no tener el cargo de conciencia de cosas sin hacer, sueños sin realizar, palabras sin decir.
Morir sabiendo que reíste mucho, disfrutaste del día, y de la noche, sabiendo que amaste lo suficiente.
Porque uno nunca ríe lo suficiente. Pocos disfrutan el día a día  el minuto a minuto. Solo algunos aman completamente, entregándose en cuerpo y alma, ya sea un trabajo, una actividad o una persona.
Lograr que los buenos momentos tengan mucho mas peso que los malos es lo más fácil del mundo, pero nadie lo pone en práctica
Hay que vivir para que morir no importe.
Que morir mañana no sea una preocupación.
Ese es el mensaje de la frase.
Porque mañana, la semana que viene, el mes que viene, en un año o en 10, nos va a tocar, nadie se va a salvar y nunca se sabe lo que puede pasar.

2.11.12

Realidad


Que ganas de huir de la realidad por un día. O un rato.
Estar en un lugar, donde no importe nada. Que no exista nada mas q el ahora.
Olvidarte de los problemas, responsabilidades y todo lo q afecte de alguna forma nuestra vida.
¿Cuantas veces pudiste sentir eso? que de un segundo para otro no importe mas nada que el ahora.
Está bueno que pase de vez en cuando.
Pero de un momento a otro, lo estas pasando muy bien, hasta que se termina y te acordás que esta la realidad.
Te acordás que hay mas que ese momento, que tenés trabajo, que tenés que estudiar, tenés que ir a entrenar.
Que tenés una familia, una casa.
Y te enteraste de que la realidad es mucho más dura... Mucho más que ese momento que pasaste alejado de ella.
Y reflexionas. Y te das cuenta, que esa realidad, siempre va a estar ahí esperándote.
Y por mas que escapando de ella, la pases mucho mejor, nunca vas a poder escapar del todo.

5.10.12

La Carretera


   Y llegó un día en el que decidió sentar cabeza de una vez y paso de tomar siempre peligrosos atajos diferentes a tomar la carretera más larga, la más segura.

   Es increíble lo fácil q suena, lo difícil que es, lo simple que es.

   Son las 5 de la mañana de un jueves, y en lo único que puede pensar es en agarrar la carretera, dejar de buscar atajos, atajos que ya conoce, que el sabe que tomándolos no va a pasar nada malo, o por lo menos no se va morir, ni le van a robar el auto.

   Es inimaginable lo tedioso que se hace, lo divertido que es.

   Los atajos, como bien saben todos, son caminos más cortos, poco conocidos algunos, con poco transito, pero que si no se conocen bien, se puede terminar perdido y metido en el medio de la nada, sin nadie, o con alguien q no te gustaría cruzarte en el medio de la nada.
Es muy emocionante llegar más rápido, es muy aburrido ser el primero en llegar y tener que esperar a alguien más.

   Como bien saben todos, la carretera es un camino que se toma para trasladarse de un lugar a otro medianamente rápido, donde muchas veces hay mucho transito, donde puede haber accidentes, donde la gente puede quedar herida o incluso puede perder su vida. La mayoría de los conductores ponen su vista en el camino, algunos disfrutan del camino, otros escuchan música y unos pocos disfrutan del paisaje.

   Es increíble lo detestable que es manejar en la carretera, lo hermoso que es el paisaje, lo lindo que es tener un buen acompañante.

   Y finalmente decidió tomar la carretera, la más larga, la mas segura, con el mejor acompañante y con el mejor paisaje. 

   Y se dio cuenta en lo lindo, lo divertido y lo hermoso que puede ser manejar por la carretera. Disfrutando de la compañía, del paisaje y del camino. 

  Porque al fin y al cabo se dio cuenta, y aprendió, que no tiene sentido, llegar a destino, sin haber disfrutado el recorrido.

1.8.12

Invictus

Out of the night that covers me, 
Black as the pit from pole to pole, 
I thank whatever gods may be, 
For my unconquerable soul. 

In the fell clutch of circumstance, 
I have winced but not cried aloud. 
Under the bludgeonings of chance, 
My head is bloodied but unbowed. 

Beyond this place of wrath and tears, 
Looms but the horror of the shade. 
And yet the menace of the years, 
Finds, and shall find me, unafraid 

It matters not how strait the gate, 
How charged with punishments the scroll, 
I am the master of my fate, 
I am the captain of my soul. 

30.7.12

Idealización Humana


Como sabrán, o tal vez no, una de las peores cosas que le puede pasar al hombre es desilusionarse.
No hablo de desilusionarse porque pensamos que íbamos a ver a una persona, o porque nos dijeron que nos iban a regalar algo, o porque creímos que íbamos a ir al cine o alguna parte y al final no.
Hablo de desilusionarse de la gente (que no se confunda con defraudarse o decepcionarse que son cosas distintas).
Nos desilusionamos porque idealizamos.
Siempre esperamos más de lo que nos pueden dar.
Esa es una de las cosas más duras que nos pasa en la vida. Y a todos nos pasó en algún momento.
Incluso antes de conocer bien a alguien, por alguna razón, creemos que puede llegar a ser nuestro mejor amigo, o el amor de tu vida y la verdad es que tal vez, ni siquiera llegue a ser más que un conocido.
Creo que es la naturaleza del ser humano. Esperar más de los demás; que sean mejores de lo que pueden llegar a ser, que nos traten mejor de lo que nos tratan, que nos hablen más de lo que nos hablan o que nos quieran más de lo que nos quieren... si es que nos quieren.
¿Para qué esperar algo más, o algo mejor, de alguien si sabemos que no lo puede dar, que no lo quiere dar, y que por más que intentemos mucho, no lo va a dar?
¿Para que buscar en una persona algo que sabemos que no tiene y nos lo puede dar alguien que tenemos muy cerca?
¿Por qué querer que esa persona sea otra?
¿Cómo se  puede querer a una persona, por lo que crees que puede llegar a ser?
¿Cómo se puede querer a alguien, que es de una manera, pero esperamos que sea de otra?
¿Cómo te podes enamorar de lo que vos queres que sea alguien?
¿Por qué idealizamos a las personas?
Sé que tal vez son muchas preguntas, que quizás no se entienden, pero son dudas existenciales que tengo desde hace tiempo.
Tal vez no pueda encontrarle respuesta, pero tal vez haciéndolas, algunos compartan las mismas dudas que tengo yo.
Creo que es la naturaleza del ser humano. Esperar más de los demás.
Querer que el otro sea algo que nosotros pensamos que puede llegar a ser. Ya sea tu amigo, un familiar, tu novia o tu vecina de al lado.
Es la estupidez de naturaleza humana. Esperar que los demás sean algo que no son.


15.4.12

Final OTH


Es la historia más vieja del mundo.
Un día tienes diecisiete años y estás
planeando lo que serás algún día...
y entonces, sin hacer ruido, y sin
que de verdad te hayan avisado...
algún día, es hoy.
Y luego algún día, es ayer.
Y esta es tu vida.
Si tuvieras un amigo que supieras
que nunca volverías a ver...
¿Qué le dirías?
Si pudieras hacer una última cosa
para alguien a quién quieres....
¿Cuál sería?
Dilo.
Hazlo.
No esperes.
Nada dura para siempre.
¿Por qué la gente malgasta
tanto tiempo peleándose?
¿Y dónde nos lleva esto?
Es divertido cómo nuestro
pasado nos encuadra.
Cómo la persona que solíamos ser nunca
se pierde de la persona que somos.
Los fallos y decepciones pasadas...
incluso las victorias
forman parte de nosotros.
Nos rondan como fantasmas o
nos visitan como viejos amigos.
Es la historia más vieja del mundo.
Un día tienes diecisiete años y estás
planeando lo que serás algún día.
Y entonces, de repente,
y sin que te des cuenta,
algún día es hoy.
Entonces algún día es ayer.
Y esta es tu vida.
Pasamos mucho tiempo, queriendo,
buscando, deseando.
Pero la ambición es buena.
Perseguir las cosas
con integridad es bueno.
Soñando.
Si tuvieras un amigo que supieras
que no volverías a ver más...
¿Qué le dirías?
Si pudieras hacer una última
cosa por alquien a quien quieres,
¿cuál sería?
Dilo.
Hazlo.
No esperes.
Nada dura para siempre.
Pide un deseo y ponlo en tu corazón.
Cualquier cosa que quieras.
Todo lo que quieras.
¿Lo tienes? Bien.
Ahora cree que se puede hacer realidad.
Tú nunca sabes de donde va
a venir el próximo milagro.
El próximo recuerdo.
La próxima sonrisa.
El próximo deseo hecho realidad.
Pero si crees que está
doblando la esquina...
Y abres tu corazón y tu mente
ante esa posibilidad...
a la certeza de que
podrías conseguir lo
que estabas deseando.
El mundo está lleno de magia.
Solo tienes que creer en ella.
Así que pide tu deseo.
¿Lo tienes?
Bien.
Ahora cree en ello.
Con todo tu corazón.

7.3.12

El Principito Y La Flor

Y si yo sé de una flor única en el mundo y que no existe en ninguna parte más que en mi planeta; si yo sé que un buen día un corderillo puede aniquilarla sin darse cuenta de ello, ¿es que esto no es importante?


Si alguien ama a una flor de la que sólo existe un ejemplar en millones y millones de estrellas, basta que mire las estrellas para ser dichoso. Puede decir
satisfecho: "Mi flor está allí, en alguna parte…" ¡Pero si el cordero se la come, para él es como si de pronto todas las estrellas se apagaran! ¿¡Y esto no es importante!?
No pudo decir más y estalló bruscamente en sollozos.


"la flor que tú quieres no corre peligro… te dibujaré un bozal para tu cordero y una armadura para la flor…te…". No sabía qué decirle, cómo consolarlo y hacer que tuviera nuevamente confianza en mí; me sentía torpe. ¡Es tan misterioso el país de las lágrimas!


Siempre había habido en el planeta del principito flores muy simples adornadas con una sola fila de pétalos que apenas ocupaban sitio y a nadie molestaban. Aparecían entre la hierba una mañana y por la tarde se extinguían. Pero aquella había germinado un día de una semilla llegada de quién sabe dónde, y el principito había vigilado cuidadosamente desde el primer día aquella ramita tan diferente de las que él conocía. Podía ser una nueva especie de Baobab. Pero el arbusto cesó pronto de crecer y comenzó a echar su flor. El principito observó el crecimiento de un enorme capullo y tenía el convencimiento de que habría de salir de allí una aparición milagrosa; pero la flor no acababa de preparar su belleza al abrigo de su envoltura verde.
¡Ah, era muy coqueta aquella flor!


La flor, que había trabajado con tanta precisión, dijo bostezando:
— ¡Ah, perdóname… apenas acabo de despertarme… estoy toda despeinada…!
El principito no pudo contener su admiración:
— ¡Qué hermosa eres!
— ¿Verdad? — respondió dulcemente la flor —. He nacido al mismo tiempo que el sol.
El principito advirtió que ella no era muy modesta, ¡pero era tan conmovedora!


Y así, ella lo había atormentado con su vanidad un poco sombría. Un día, por ejemplo, hablando de sus cuatro espinas, dijo al principito:
— ¡Ya pueden venir los tigres, con sus garras!
—No hay tigres en mi planeta — observó el principito — y, además, los tigres no comen hierba.
—Yo no soy una hierba — respondió dulcemente la flor.
—Perdóname...
—No temo a los tigres, pero tengo miedo a las corrientes de aire. ¿No tendrás un biombo?
"Miedo a las corrientes de aire no es una suerte para una planta —pensó el principito—. Esta flor es demasiado complicada…"
—Por la noche me meterás bajo un globo… hace mucho frío en tu tierra. No se está muy a gusto; allá de donde yo vengo…
La flor se interrumpió; había llegado allí en forma de semilla y no era posible que conociera otros mundos. Humillada por haberse dejado sorprender inventando una mentira tan ingenua, tosió dos o tres veces para atraerse la simpatía del principito.
— ¿Y el biombo?
— Iba a buscarlo, pero como no dejabas de hablarme…
Insistió en su tos para darle al menos remordimientos.
De esta manera el principito, a pesar de la buena voluntad de su amor, había llegado a dudar de ella. Había tomado en serio palabras sin importancia y se sentía desgraciado.
"Yo no debía hacerle caso — me confesó un día el principito — nunca hay que hacer caso a las flores, basta con mirarlas y olerlas. Mi flor embalsamaba el planeta, pero yo no sabía gozar con eso…
Aquella historia de garras y tigres que tanto me molestó, hubiera debido enternecerme".
Y me contó todavía:
“¡No supe comprender nada entonces! Debí juzgarla por sus actos y no por sus palabras. ¡La flor perfumaba e iluminaba mi vida y jamás debí huir de allí! ¡No supe adivinar la ternura que ocultaban sus pobres astucias! ¡Son tan contradictorias las flores! Pero yo era demasiado joven para saber amarla".


Y cuando regó por última vez la flor y se dispuso a ponerla al abrigo del globo, sintió ganas de llorar.
— Adiós — le dijo a la flor. Esta no respondió.
— Adiós — repitió el principito.
La flor tosió, pero no porque estuviera resfriada.
— He sido una tonta — le dijo al fin la flor —. Perdóname. Procura ser feliz.
Se sorprendió por la ausencia de reproches y quedó desconcertado, con el globo en la mano, no comprendiendo esta tranquila mansedumbre.
—Sí, yo te quiero — le dijo la flor—, ha sido culpa mía que tú no lo sepas; pero eso no tiene importancia. Y tú has sido tan tonto como yo. Trata de ser feliz. . . Y suelta de una vez ese globo; ya no lo quiero.
—Pero el viento...
—No estoy tan resfriada como para... El aire fresco de la noche me hará bien. Soy una flor.
— Pero los animales...
—Será necesario que soporte dos o tres orugas, si quiero conocer las mariposas; creo que son muy hermosas. Si no ¿quién vendrá a visitarme? Tú estarás muy lejos. En cuanto a las fieras, no las temo: yo tengo mis garras.
Y le mostraba ingenuamente sus cuatro espinas. Luego añadió:
—Y no prolongues más tu despedida. Puesto que has decidido partir, vete de una vez.
La flor no quería que la viese llorar: era tan orgullosa...


Una vez en al tierra sucedió que el principito, habiendo atravesado arenas, rocas y nieves, descubrió finalmente un camino. Y los caminos llevan siempre a la mora-da de los hombres.
— ¡Buenos días! — dijo.
Era un jardín cuajado de rosas.
— ¡Buenos días! — dijeron las rosas.
El principito las miró. ¡Todas se parecían tanto a su flor!
— ¿Quiénes son ustedes? — les preguntó estupefacto.
— Somos las rosas — respondieron éstas.
— ¡Ah! — exclamó el principito.
Y se sintió muy desgraciado. Su flor le había dicho que era la única de su especie en todo el universo. ¡Y ahora tenía ante sus ojos más de cinco mil todas semejantes, en un solo jardín!
“Si ella viese todo esto, se decía el principito, se sentiría vejada, tosería muchísimo y simularía morir para escapar al ridículo. Y yo tendría que fingirle cuidados, pues sería capaz de dejarse morir verdaderamente para humillarme a mí también... "
Y luego continuó diciéndose: "Me creía rico con una flor única y resulta que no tengo más que una rosa ordinaria." Y echándose sobre la hierba, el principito lloró.


Entonces apareció el zorro:
— ¡Buenos días! — dijo el zorro.
— ¡Buenos días! — respondió cortésmente el principito que se volvió pe-ro no vio nada.
— Estoy aquí, bajo el manzano — dijo la voz.
— ¿Quién eres tú? — preguntó el principito —. ¡Qué bonito eres!
— Soy un zorro — dijo el zorro.
— Ven a jugar conmigo — le propuso el principito—, ¡estoy tan triste!
— No puedo jugar contigo — dijo el zorro —, no estoy domesticado.
— ¡Ah, perdón! — dijo el principito.


¿Qué significa "domesticar"? —preguntó el principito.
— Es una cosa ya olvidada — dijo el zorro —, significa "crear vínculos..."
— ¿Crear vínculos?
— Efectivamente, verás — dijo el zorro —. Tú no eres para mí todavía más que un muchachito igual a otros cien mil muchachitos y no te necesito para nada. Tampoco tú tienes necesidad de mí y no soy para ti más que un zorro entre otros cien mil zorros semejantes. Pero si tú me domesticas, entonces tendremos necesidad el uno del otro. Tú serás para mí único en el mundo, yo seré para ti único en el mundo...
— Comienzo a comprender — dijo el principito —. Hay una flor... creo que ella me ha domesticado...
— Es posible — concedió el zorro —


—Mi vida es muy monótona. Cazo gallinas y los hombres me cazan a mí. Todas las gallinas se parecen y todos los hombres son iguales; por consiguiente me aburro un poco. Si tú me domesticas, mi vida estará llena de sol. Conoceré el rumor de unos pasos diferentes a todos los demás. Los otros pasos me hacen esconder bajo la tierra; los tuyos me llamarán fuera de la madriguera como una música. Y además, ¡mira! ¿Ves allá abajo los campos de trigo? Yo no como pan y por lo tanto el trigo es para mí algo inútil. Los campos de trigo no me recuerdan nada y eso me pone triste. ¡Pero tú tienes los cabellos dorados y será algo maravilloso cuando me domestiques! El trigo, que es dorado también, será un recuerdo de ti. Y amaré el ruido del viento en el trigo.
El zorro se calló y miró un buen rato al principito:
— Por favor... domestícame — le dijo.
— Bien quisiera — le respondió el principito pero no tengo mucho tiempo. He de buscar amigos y conocer muchas cosas.
— Sólo se conocen bien las cosas que se domestican — dijo el zorro —.


De esta manera el principito domesticó al zorro. Y cuando se fue acercando el día de la partida:
— ¡Ah! — dijo el zorro —, lloraré.
— Tuya es la culpa — le dijo el principito —, yo no quería hacerte daño, pero tú has querido que te domestique...
— Ciertamente — dijo el zorro.
— ¡Y vas a llorar!, — dijo él principito.
— ¡Seguro!
— No ganas nada.
— Gano — dijo el zorro — he ganado a causa del color del trigo.
Y luego añadió:


— Vete a ver las rosas; comprenderás que la tuya es única en el mundo. Volverás a decirme adiós y yo te regalaré un secreto.— dijo el zorro —


El principito se fue a ver las rosas a las que dijo:


— No son nada, ni en nada se parecen a mi rosa. Nadie las ha domesticado ni ustedes han domesticado a nadie. Son como el zorro era antes, que en nada se diferenciaba de otros cien mil zorros.
Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo.
Las rosas se sentían molestas oyendo al principito, que continuó diciéndoles:
— Son muy bellas, pero están vacías y nadie daría la vida por ustedes. Cualquiera que las vea podrá creer indudablemente que mí rosa es igual que cualquiera de ustedes. Pero ella se sabe más importante que todas, porque yo la he regado, porque ha sido a ella a la que abrigué con el globo, porque yo le maté los gusanos (salvo dos o tres que se hicieron mariposas) y es a ella a la que yo he oído quejarse, alabarse y algunas veces hasta callarse. Porque es mi rosa.


Y volvió con el zorro.
— Adiós — le dijo.
— Adiós — dijo el zorro —. He aquí mi secreto, que no puede ser más simple: sólo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible para los ojos.
—Lo que hace más importante a tu rosa, es el tiempo que tú has perdido con ella. Eres responsable para siempre de lo que has domesticado. Tú eres responsable de tu rosa...


El principito estaba cansado y se sentó; yo me senté a su lado y después de un silencio me dijo:
—Las estrellas son hermosas, por una flor que no se ve...
— Los hombres de tu tierra — dijo — cultivan cinco mil rosas en un jardín y no encuentran lo que buscan.
— No lo encuentran nunca — le respondí.
— Y sin embargo, lo que buscan podrían encontrarlo en una sola rosa o en un poco de agua...
— Sin duda, respondí. 
Y el principito añadió:
— Pero los ojos son ciegos. Hay que buscar con el corazón.
— ¿Sabes?... mi flor... soy responsable... ¡y ella es tan débil y tan inocente! Sólo tiene cuatro espinas para defenderse contra todo el mundo...

18.2.12

Whitey


Tener las cosas realizadas de la forma como uno quiere... Es la medida para una vida exitosa.
Entonces, algunos dirían que yo soy un fracaso. La cosa más importante... es no sufrir por las decepciones de la vida. Aprender a dejar el pasado atrás.
Yo reconozco, que no cada día... Será soleado.
Pero cuando te encuentres perdido en la oscuridad y en la desesperación...
Acuérdate... que es solamente en la oscuridad de la noche, que podemos ver las estrellas.
Y ninguna estrella... te guiará de vuelta a casa. Entonces no tengas miedo de cometer errores.
O de tropezar y caerte. Pues en la mayoría de las veces...
Los mejores premios, vienen cuando se hace aquello que más temes. Tal vez consigas todo lo que deseas.
Tal vez, consigas más de lo que jamás hayas imaginados.
Quien sabe donde la vida te llevará? La carretera es larga. Y al final... el viaje es el destino.

6.2.12

Año nuevo, Año viejo

2011... Se fue un año entero, un año muy largo q se pasó demasiado rápido.
Yo sé que muchos esperan q termine, para dejar atrás algunas cosas, para cerrar alguna etapa que en realidad siempre va a quedar abierta, para cambiar cosas q no les gusta de sí mismo que no van a cambiar nunca.
Otros quieren q no se termine, porque no quieren que las cosas cambien, porque están bien como están, para no tener nuevas responsabilidades o para no separarse de algunas personas.
Algunos simplemente lo están esperando tranquilos sabiendo q en realidad lo único cambia es el calendario que tienen pegados en la heladera, o el almanaque que tienen guardado en la billetera.
Hay muchas formas de ver el año nuevo, algunos lo ven como una oportunidad para cambiar, otros como una nueva etapa por venir, otros piensan q lo malo se va a ir como por arte de magia.
Antes veía el año nuevo como un comienzo nuevo, no simplemente un comienzo de año, sino de un cambio de vida.
Y en realidad nunca me di cuenta de q mi forma de vida, y la de todos, no cambia en año nuevo, sino durante todo el año.
Vamos transformándonos nosotros, nuestra personalidad y nuestro carácter, a medida que nos van pasando cosas buenas y malas, y depende de cómo las tomamos, es el cambio q hacemos.
Lo q pasa es q en año nuevo, uno siempre se pone a recordar las cosas q hizo y que fueron sucediendo a lo largo de esos 12 meses, 
y de repente se junta todo en un solo día, y empezamos a pensar como tratamos a tal persona, que cosas le dijimos a otras, que NO le dijimos, q cosas no hicimos, cuales nos hubiera encantado hacer.
Y también que es lo que vamos a cambiar, que vamos a hacer en los próximos 12,
Sin darnos cuenta que en realidad a lo largo del año fuimos cambiando de a poco y todo eso q pensamos ya está hecho.
Sin darnos cuenta que podríamos haber hecho eso mismo el 1º de noviembre, o el 31 de marzo, o 12 de julio... al caso es lo mismo.
Lo queramos o no, el tiempo pasó y no va a volver. Las cosas son como son. Los sueños sin cumplir todavía son posibles, pero eso depende de vos.
Lo más importante de esto es arriesgar y aprender a perder, y si arriesgas, y por esas razones de la vida tuviste suerte y ganaste, puede q te vuelvas una de las personas más afortunadas del mundo.
Y si perdés, no importa, estate seguro de que siempre vas a encontrar alguna ficha para poder seguir apostando. Con el tiempo vas a encontrar las fichas q necesitas.
Hay que pelear a la vida, y si tuviste mala suerte y te noqueó, quedate tranquilo, te vas a recuperar para poder seguir peleando. La vida siempre da revancha.
No dejemos q la lluvia nos impida salir, aprendamos a mojarnos, que por más fuerte q llueva, es simplemente agua, siempre va a parar de llover, y en algún momento se nos va a secar la ropa cuando salga el sol.
Así q miremos el año nuevo como un día más, pero como todos los días, hay q disfrutarlo al máximo.
Todos vamos a terminar en el mismo lugar. Lo que importa son los momentos q nos llevamos.
Simplemente eso. Sin más q decir, y con motivos de motivar.
Vamos a tratar de arriesgar, de salir a caminar bajo la lluvia, de pelear para ganar, de disfrutar el hoy, si miedo a perder, sin pensar en ganar.
La felicidad no es un estado de ánimo, es un estilo de vida.